Soy Baudelio R. Báez, un amante de la cultura emprendedora, de la vida y la naturaleza. Nací en el seno de una familia humilde y trabajadora, con principios y valores universales. Soy un guerrero de clase baja (término que pudo ser muy bien etiquetado por un ánime muy famoso de mi época de adolescente), pero en este caso, refiriéndome al nivel socioeconómico que he encontrado al llegar en este mundo.
Soy cristiano católico y soy creyente de que Jesús siempre tiene palabras que nos dan poder y esperanza, que nos ayudan a salir adelante, con Él podemos obtener inspiración, reconociendo que no debemos ser víctima de las circunstancias, sino que somos arquitectos de nuestro destino y que el cielo es el límite. Soy padre de Samuel, el hijo que tenemos con Katherin, mi amada esposa. Con mi familia, mi mejor empresa, hemos construido nuestros cimientos en Cristo, porque creemos que tiene poder sobre la vida y la muerte, estamos convencidos de que somos libres y fuertes gracias a Él y nos respaldamos en su promesa: «Para el que tiene fe todo es posible».
Me considero una persona muy perseverante y resiliente, siempre he librado una batalla contra la mediocridad. En mi corto tiempo de vida, tuve que enfrentar numerosos desafíos en la vida, y las sigo luchando para hacerle frente hoy por hoy. Soy un simple ser humano con numerosos errores y defectos, en su momento llegué a ser el preguntón en el colegio o la universidad, nunca me avergoncé de mi ignorancia o curiosidad, tuve la bendición de haber sido despedido de un empleo, he renunciado a empleos que no disfrutaba, sé lo que significa sufrir en carne propia la situación de estar desempleado, la incertidumbre hacia el futuro y la indiferencia de mucha gente, conozco esas horas interminables de realizar búsquedas por Google y Youtube de formas de generar por lo menos alguna forma de ingreso, de enviar muchos emails adjuntados con mi CV para pedir trabajo, recorrer muchas calles mirando buses llenos de gente que iban a su rutina diaria y darte la sensación de que la vida y el tiempo nunca se detienen. Reflexionaba siempre a su vez, recordándome de algún letrero que he leído en uno de mis viajes camino al trabajo en uno de esos buses hacinados que decía: «Si piensas que es costosa la educación, piensa cuán costosa es la ignorancia».
No es fácil resumir mi manera de ver las cosas. Mi paradigma frente al dinero y las finanzas empezó a cambiar 180° un día en que fui entrando lentamente dentro de un salón de clases de la facultad donde estudiaba, corrían los últimos días de verano del año 2010 cuando escuché a un profesor en una asignatura optativa llamada «Administración Gubernamental», un economista al que sólo nombraré P. V. (+) en su memoria, pronunciar unas palabras que quedaron resonando en el fondo de mi mente: «Nunca piensen que un título universitario les va a garantizar tener un trabajo seguro», y esto otro «Yo ya llevo 20 años que estoy pagando mi casa…», a continuación citó el libro de «Padre rico, padre pobre». En ese momento no estaba tan interesado, la materia me resultaba aburrida, ya que venía cansado de un trabajo a tiempo parcial que estaba teniendo, pero me quedaba algo de energía para anotar eso, esperando leerlo algún día. No fue sino hasta dos años más tarde en el año 2012, que en otra asignatura, llamada «Emprendedorismo», a unos meses después de que me haya tomado un colapso físico y mental por stress, me acordé de aquella anotación, y me devoré ese libro por completo. Tuvo que suceder eso para que despierte mi interés en leer otros libros asociados al mismo autor: Robert Kiyosaki. La lectura de ellos me hicieron reflexionar de cómo fui el resultado de lo que nos van enseñando en un 90% en nuestras casas y en la escuela, eso de «Obtén buenas notas y serás bien pagado por una buena empresa o el gobierno» o «Cómprate una casa y será tu mejor activo» y uno de los más difusos «lo más importante es tener un trabajo seguro».
Trabajar por un Blog donde asimile mis experiencias de fracaso y éxito fue uno de los fuertes deseos que he tenido para ayudar a otras personas, naciendo en la Primavera de 2022 la idea de Talento de Millennial$, con el fin de compartir tips que personalmente me han servido de ayuda. Tengo la creencia que siempre es posible hacer un mejor uso de nuestro tiempo y dinero, incluso en momentos donde hemos tocado fondo, donde podríamos aprovechar esas circunstancias para inspirarnos, crecer espiritualmente, buscar libros, realizar búsquedas en internet y formarte o capacitarte en algo que sea productivo en el futuro.
Quiero subrayar lo que aprendí en todos estos años: la calle es mejor maestra que la escuela; nadie te regala nada en la vida, y lo poco que he conseguido en lo personal fue gracias a la confianza en Dios y en mí mismo, nunca dejando de lado la humildad.
El día de mañana en un futuro no muy lejano, me gustaría brindar charlas a emprendedores para animarles que creen sus propios emprendimientos y persigan sus sueños, y porqué no, lograr tener una institución incubadora de startapps, que brinde tecnologías y enseñanzas para crecimiento personal e integral de las personas.
Bien, por último, espero que sigas visitando nuestro sitio web con frecuencia, y recuerdes que el sol brilla para todos. Te deseo el mayor de éxitos y bendiciones.
